Helicoidal. Como la vida misma. Una hélice. A veces estás arriba, a veces abajo, pero todo relativo, dependiendo del punto de mira. Lo importante es no dejar de girar, porque en cada vuelta aprendes, cada vuelta te enseña, cada vuelta es distinta. En algún punto quizás tu vuelta se una con la de otras personas, que te aportarán más o menos. Esta hélice es tuya, asique solo tú podrás aprovecharla, explotarla al máximo y siempre siempre afrontarla con ganas e ilusión. Cada una de mis vueltas ha sido muy distinta a la anterior, pero todas especiales. Y no hay ninguna sola en la que pierda el norte, bueno, solo cuando él me mira. Y si una cosa tengo clara, es que él, la biología, naturaleza y fotografía, no se van a separar de mi hélice ni un solo día.
Y que mejor manera de mostraros otro pedacito de mí en esta sesión de fotos a esta Helix aspersa. Porque lo importante, es no dejar de girar.
Buenos días!! :)
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